Quiero enamorarme de un corazón entero, vivo, latente. Aunque haya estado deshecho antes, que se sepa curar. Un corazón sano, que elija latir junto al mío, solo por seguir el compás y no por no perder sus latidos. Un corazón fuerte, que tenga tantas ganas locas de salir a la vida como el mío. Un corazón libre, con hambre de volar. Con ganas de estar y estallar de alegría cuando ve el sol. Un corazón que se anime a jugar, a abrazarlo todo, a mirar.